Queridos Hermanos:

El próximo 30 de noviembre estamos convocados a participar en el Cabildo General de Elecciones para votar y elegir a la nueva Junta de Gobierno que dirigirá los designios de nuestra querida Hermandad durante los próximos cuatro años. Desde mi profunda devoción a Nuestros Sagrados Titulares, y después de haber informado de mi intención tanto a nuestro Director Espiritual como a nuestro Hermano Mayor, considero que este es el momento oportuno para presentar mi candidatura, y lo hago con el máximo respeto hacia todos los hermanos y en representación de un importante sector de ellos.

Mi compromiso como Candidato

Me presento a candidato a Hermano Mayor con ilusión renovada y la experiencia acumulada durante años de servicio a nuestra Hermandad de la Macarena. En estos momentos, emocionado y agradecido, llevo en mi corazón a quienes me precedieron y tanto me enseñaron a quererla y a servirla.

Quiero que sepáis que me presento como una opción, pero nunca como una oposición, y que cuento con el apoyo de numerosos hermanos que, como yo, creemos que es necesario un cambio de rumbo en todos los aspectos y facetas, sobre todo en su concepto de Hermandad. Muchos de ellos me han impulsado a dar este paso y me han solicitado que nuestra corporación recupere su excelencia en todos los ámbitos, que sea más cercana, humilde, inclusiva, abierta y participativa, donde todos los hermanos, después de Nuestros Titulares, sean el principal centro de atención.

Una Hermandad con futuro

Como candidato soy consciente de que el Hermano Mayor debe definir el presente y elaborar un plan estratégico que siente las bases del futuro de nuestra Hermandad, sin olvidarme de que, como asociación pública de fieles de la Iglesia Católica que somos colaboraremos filialmente con nuestra Diócesis de Sevilla, en comunión con el Excmo. y Rvdmo. Sr. Arzobispo D. José Ángel Saiz Meneses.

Deseo mantener la esencia e idiosincrasia de nuestra Hermandad de la Macarena, contar siempre con todos nuestros hermanos, a los que trataré con respeto y cariño, de tal modo que se sientan como en su casa cada vez que entren en la Basílica. También me preocupan especialmente aquellos hermanos que viven la Hermandad desde lejos y que sienten la lejanía geográfica que no sentimental, de la Virgen de la Esperanza. Especialmente quiero cuidarlos y atenderlos con dedicación, porque sé, por boca de ellos y por mi propia experiencia, al haberlos atendido en muchas ocasiones, la dificultad que implica estar alejados de Ella.

Un proyecto que nos une

En breve os presentaré un proyecto que supondrá la oportunidad de ilusionar a los hermanos con una propuesta que marque el futuro de nuestra Institución, devolviendo la Hermandad a los hermanos.

Un proyecto ilusionante pensado para sus hermanos. Un programa con el que os sintáis felices, orgullosos y partícipes de la vida de Hermandad, en la que para todos sea “LA HERMANDAD QUE QUIERES”, tal y como reza nuestro lema.

Propongo reforzar los lazos de unión con la Parroquia de San Gil Abad y, por ende, con la feligresía a la que pertenecemos, mirando a nuestros orígenes de barrio, aunque seamos una Hermandad universal.

Unidos en el servicio y la esperanza

Como os digo, buscaré la excelencia en todo y principalmente en nuestros pilares fundamentales: culto, formación, asistencia social y nueva evangelización. Espero que nuestra Asistencia Social siga creciendo, centrada en nuestros hermanos, en la feligresía y en una mayor colaboración con las Hermanitas de la Cruz, madrinas de la Coronación Canónica de la Virgen de la Esperanza y a quienes tanto debemos. Además, propondré un plan integral para preservar y enriquecer nuestro patrimonio, e instauraré comisiones permanentes, contando con los mejores expertos, en todas las áreas que sean necesarias, principalmente en priostía y patrimonio.

En cuanto a la comunicación institucional, será moderna, clara y directa. Las gestiones, tanto económica como administrativa, serán transparentes y eficientes.

Confío plenamente en el proceso electoral y pido a todos los candidatos que mantengan un discurso ético, respetuoso y constructivo. Instaré para que no permitamos desencuentros ni ofensas en las redes sociales. Considero que cada candidatura tiene diferentes visiones sobre una misma Hermandad y sobre sus hermanos; por ello, es mi deseo que cada cual presente libremente su programa, sin interferir en el de los demás, con respeto, fomentando la participación con educación y total transparencia, y pensando en que quienes no resulten elegidos, al día siguiente, se pongan al servicio de la Hermandad y de la Junta de Gobierno que resulte electa.

Pronto presentaré una candidatura formada por hermanos macarenos ilusionados por servir a nuestra Hermandad, con espíritu fraterno, equilibrada entre madurez y juventud, mujeres y hombres, algunos con experiencia previa en anteriores Juntas de Gobierno y otros que se presentan por primera vez, ofreciéndonos nuevas perspectivas de presente y futuro.

Tanto los componentes de mi candidatura como yo, somos conscientes del trabajo que nos espera y estamos dispuestos a asumirlo, contando con el apoyo mayoritario de todos vosotros el próximo día 30 de noviembre de 2025.

Desde estas líneas pido que la Virgen del Rosario, el Señor de la Sentencia y la Virgen de la Esperanza nos bendigan a todos y protejan a nuestras familias.

Esperando contar con vuestro apoyo y confianza en este proyecto:

¡Viva Nuestra Señora del Santo Rosario!

¡Viva Nuestro Padre Jesús de la Sentencia!

¡Viva Nuestra Señora de la Esperanza!

Recibe un fraternal abrazo, con la certeza de que juntos haremos la Hermandad que quieres.

Atentamente,